Bienvenidos

¡Bienvenidos! Este no es un blog de repostería creativa al uso. Aquí tenéis una mezcla de dos aficiones: los postres y escribir lo primero que se me viene a la cabeza. Echadle un poquito de azúcar y humor a vuestras vidas, seguro que os sentiréis mejor. ¡Gracias por leerme!

Os podéis poner en contacto conmigo con el correo electrónico que aparece en la cabecera.

También estoy en facebook. Pincha aquí para visitar mi página.

Gracias (otra vez)

Un abrazo... Dulcemente

miércoles, 5 de diciembre de 2012

NAVIDAD, NAVIDAD, DULCE NAVIDAD (LÉASE CANTANDO, HÁGAME EL FAVOR)

   Bueno, bueno, bueno... Parece ser que ya es Navidad. Lo ha dicho el mismísimo Sr. Corte Inglés y, como se suele decir, "díjolo Blas, punto redondo" (aunque mi hijo lleva semanas cautivando mis oídos con la pandereta). Por lo tanto, hablemos de ella.

   La Navidad es una dicotomía en si misma: te encanta y la odias al mismo tiempo. Es un poco como esos discos recopilatorios que te compras con toda la ilusión, pero luego solo te gustan tres canciones. Y es que la Navidad viene en un pack indivisible, como los yogures. 













 

  La Navidad es típica: el típico árbol de Navidad, la típica cena de Nochebuena, el típico sorteo de Navidad (y los señores que salen ese día por la tele agitando una botella de champán, también son típicos), la típica tía segunda que se amorra a tu mejilla y es capaz de besarte unas quince veces en un nanosegundo, la típica cogorza del cuñado...



 
   Pero si hay algo típico, típico, es el Belén. Este año nos ha llegado la noticia de que en el Portal de Belén no había ni mula ni buey. Para mi estaba clarísimo. En el Portal de Belén hay "estrellas, sol y luna, la Virgen y San José y el niño que está en la cuna". Y si además metemos una caterva de pastores y pastoras con sus zambombas y sus panderos, los ratones que roen los calzones, los gitanillos que roban pañales, la burra que lleva chocolate, el pastorcillo del tamborilero (que tiene una pintaza de ser un brasas de "cuidao"), el hombre que hace gachas y no uno ni dos, si no tres reyes magos ¿dónde narices metemos una mula y un buey?. ¡No hombre, no! A la mula y al buey los mandaron a remendarse a Holanda que ya se ve, ya se ve como viene.




  ¡Ay los villancicos! Esas tonadillas populares de esmerada armonía que se te incrustan sin quererlo en el subconsciente cerebral para escaparse por tu boca con pizpireta alegría cuando menos hace falta. En el ascensor, en la cola del super, en la oficina...  ¡Esa sonoridad! ¡Ese verso cuidado! ¡Esas enseñanzas! Toda una oda a la hermandad entre los seres humanos del universo, como manda el espíritu navideño...
- "En la puerta de mi casa voy a poner un petardo(...)"
- "(...) el tendero de la esquina, ha tenido la atención de tirarle a la cabeza un pedazo de turrón"
- "(...) Coge tú las tapaderas, que no hay que dejar dormir ni al de arriba ni al de abajo (...)"
¡Que jodíos esos que se inventaron lo del espíritu navideño! je!

  Ahora bien. Una de las mayores "tipiqueces" de la Navidad, no es otra que los DULCES. ¡Bien! Ya estamos en lo que nos gusta. Esas bandejas que pesan quintales, llenitas de turrones, orejones, pasas, polvorones, nueces, peladillas (esas a las que si les hicieran la prueba del "carbono 14" datarían del año 0)... ¡Dulces! Y mira que no tenemos hambre... Más bien nos entran serias dudas de acercarnos a urgencias a ver si nos operan para sacarnos el cordero, porque no hay forma de digerirlo...  Pero picamos. Y por eso os traigo mis dulces navideños: cake-pop árboles, árboles galleta y galletas-regalo. 





   Para el que aún no lo sepa, los Cake-pops son bolas de bizcocho de sabores varios. En este caso, la bola no es una bola, sino un gallardo arbolillo de navidad bañado en chocolate verde y emperejilado con más chocolate.






   Las galletas son de mantequilla. No os podéis imaginar cómo huelen mientras las horneo. Es prácticamente imposible aguantar la tentación de abrir el horno y zampártelas sin compasión. Para el que quiera la receta, le remito a el rincón de Bea, genial repostera. La decoración es a base de manga pastelera y glaseado de colores.


  
   Solo me falta, para terminar, desearos que lo paséis pipa estos días de vorágine navideña. Disfrutad de los apretujones en las tiendas, de las carreras de última hora, de las luces abrumadoras, de los atascos con el coche, de la tía segunda y del cuñado bolinga. Disfrutad, porque es lo que toca. Es Navidad.




   Yo, por mi parte, pasaré la Navidad viendo como beben los peces en el río. Ya que esos niños tan simpáticos lo cantan con tanta insistencia, me parece mal hacerles el feo...

Un navideño abrazo... Dulcemente




 

viernes, 30 de noviembre de 2012

LAS COSAS SERIAS

  En la vida, hay cosas que son muy serias y otras, no tanto.
Las cosas "serias" son las que llevan corbata e, incluso, chaqué.
Las otras son de las de andar en chándal e, incluso, pijama.
Con las primeras carraspeamos y ponemos la espalda tiesa. Con las segundas nos repantingamos tranquilamente.
Y quien dice "serio", dice importante, valioso o, como diría mi hijo; "de mayores".
Os preguntaréis el por qué de esta profunda reflexión y, es que, diferenciar las cosas de corbata de las de chándal, no siempre es tarea fácil.


  Desde aquí propongo la entrada inminente en la plantilla de la NASA a... los ladrones de joyerías. Sí, sí, porque no sé cómo se lo montan cuando "alunizan" el coche en el escaparate, rompiéndolo en mil pedazos, y luego son capaces de diferenciar los cristalillos brillantes de los diamantes. Debe ser cosa de superhéroes con rayos betagalvánicos en los ojos. Pero si pensamos en un diamante, es una cosa seria. Un cristalillo pues es... un cristalillo... el caso es que brilla taaaan bonito... pero no es un diamante... es un cristalillo... ¿o no?


   Pero lo que realmente me trae de cabeza, es: ¿qué es más serio un caracol o una mosca? Dificililla está la cosa ¿eh? ¡je! Ambos son bichos. Uno es un ser babeante, rastrero y un poco asquerosillo. La otra es molesta en mayor o menor grado (según lo desarrollado que tenga ella el gen de la pesadez y lo poco maduro de tu gen de aguante). Diréis que los bichos no son cosas serias. Entonces... ¿por qué montamos la marimorena si encontramos una mosca en la sopa y nos chupamos los dedos ante un plato de caracoles? ¡Si hasta la mismísima Pretty Woman sucumbe ante unos pocos escargots!


  ¡En fin! todos estos pensamientos nos llevan al verdadero meollo de la cuestión. Tengo el increíble honor y el tremendo placer (que ganazas de poner "me llena de orgullo y satisfacción, por Dios!) de presentarles algo muy, muy serio. ¡Con ustedes... mis PEQUEÑOS PAYASETES!. Porque un payaso parece cosa de nada, pero en el fondo, fondo, sabemos que son muy importantes.



  Esta vez no sé si llamarlos Cake Pop, (porque palito no tienen). El relleno, en esta ocasión, es buttercream de queso, para los que les gusta el dulce, pero no tanto. La cubierta es de chocolate y confeti de colores. Y el conjunto de todo ello en la boca es sorprendente, desde luego.


 
  Antes de despedirme, os cuento que ya estoy empezando a trabajar para la temporada navideña. Imaginaréis que ando más liada que la pata de un romano, pero os prometo post y fotos de tooodas las cosas que haga. Además, ando organizando una sorpresa...

 

  Mientras tanto, no olvidéis que "EL HUMOR ES UNA COSA MUY SERIA" (Miliki)  









Un abrazo... dulcemente








 








martes, 20 de noviembre de 2012

PENSAMIENTOS PRE-NAVIDEÑOS (MISCELÁNEA, UNAS GALLETAS Y UN PAR DE ANUNCIOS)

    
¡¡Ya es pre-Navidad!! Sí, sí, pre-Navidad. La pre-Navidad son estos días previos a la Navidad en que no nos atrevemos a hablar de la Navidad en sí para no quedar como unos cursis, pero ya se va notando un qué sé yo que yo qué sé. Y es por esto por lo que hoy os enseño estas galletas pre-navideñas. Del típico rojo y verde.
   Como os decía, ya es pre-navidad. Y se nota en muchas cosas (vaya si se nota).

   Por ejemplo; ya han colgado de las calles esas lucecillas pintureras. Y tooodos hemos comentado alguna vez "¡pero bueno! ¡cada vez más pronto! Cualquier año, las ponen en Semana Santa, ya verás" Pero no están encendidas. Están ahí, quietecitas, como despistadillas. Pero no, las muy puñeteras están amenazando... "en cuanto te despistes me enciendo y ¡ya verás qué estrés!"
  
   La pre-navidad es época de anuncios pre-navideños. Aún no sale ese señor vestido de rojo. Son cosas más sutiles, más pre-navideñas. Por ejemplo; los perfumes. Ya empiezan a colarnos anuncios de aromas, fragancias, "eaus de toilets", colonias... Suelen ser mujeres lánguidas y un poquito etéreas, que no sabes muy bien de qué van. Unas se meten en piscinas doradas, otras juegan con manzanas, otras se chupan la pierna (que a mí me parece una cochinada, pero bueno). Entonces es cuando se te pone cara de "güi se muá" e intentas corretear por el pasillo de tu casa de forma lánguida y etérea también.

   Empiezan a florecer las cenas de empresa. Ese folio "pegao" en la pared de la oficina que dice: "cena de empresa en Casa Manolo, el que quiera, que se apunte". Esto es un habitual de la pre-navidad. Como lo son estos dos requisitos:
  1. ponerse bolinga
  2. sentarse lo más lejos posible del jefe que, a pesar de que esa noche se ponga bolinga como los demás, sigue siendo el jefe (y no pega verle de guay con la corbata en la cabeza)
    Siempre se dice que la Navidad es para los niños. Bueno, pues la pre-navidad es para fastidiarlos pero bien. Todo el año andamos tras ellos con cosas como: "niño, no corras", "niño, no grites", "niño, estate quieto". En la pre-navidad, les colamos de rondón la mayor de las amenazas... "¡¡que te ven los Reyes Magos!!". Eso, queramos o no, se nos queda incrustado en el subconsciente para toda la vida. ¿Por qué si no, le reímos los chistes a nuestro cuñado en la cena de Nochebuena? ¿Porque es la monda? ¡¡Noooo!!... ¡Porque nos ven los Reyes Magos!


   Y hablando de Reyes, el "top ten" de la pre-navidad, es la consabida carta a Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente. De pequeños nos esmeramos en escribir clarito y recto (todo un ejercicio de concentración, empeño y artesanía). Ahora nos hacemos una lista guarreras en cualquier papelajo que encontramos (eso en el mejor de los casos). Yo la mía la tengo en el cajón de los cubiertos. Dentro de poco, la sacaré de ahí para apuntar cualquier cosa y pensaré que está mejor en el cajón de los trapos de cocina y luego entre los libros de recetas y luego, la perderé definitivamente hasta el final de los tiempos... Soy un bicho de costumbres...


   El caso es que la pre-navidad es la época típica de reflexionar y meditar. Nos tiramos gran parte del tiempo ahí reflexionando y meditando, reflexionando y meditando. Yo creo que es la única época del año en que nuestro cerebro funciona a todo gas. Son muchos los pensamientos pre-navideños, pero todos comienzan con estas palabras: "¿qué le regalo yo a...?" Pues vamos a ver si, con estas dos propuestas, se os enciende una bombillita. Ambas son amigas mías. Trabajadoras y emprendedoras. Con un montón de ideas y cosas chulísimas.

 




  Os presento a Xelda, feitura artesá (para ver su página de facebook pinchad aquí). Bolsos, collares, broches... todo artesanal ("güeno, güeno" que me lo quitan de las manos!).








   Y por último, pero no por ello menos importante, esta es Puntoiaparte Diseño (igualmente, para ver su página de facebook pincha aquí). Camisetas molonas serigrafiadas para cualquier ocasión (como esa cena pendiente en "casa manolo").

   Y ¿qué decir de estas galletas? Pues que son galletas de mantequilla decoradas con royal icing o glasa real. Para ambas recetas sigo las indicaciones de "el rincón de Bea" (bueno, más o menos). Son unas galletas que están buenísimas decoradas y sin decorar.

   Y no os penséis que me he olvidado del jueguecito del "amigo invisible" pero es que me parecía "demasié" para un solo post. A ver si nos va a entrar el estrés antes de que se enciendan las lucecillas pintureras... (lo dejamos para la próxima pre-navidad).





Un pre-navideño abrazo... Dulcemente



viernes, 16 de noviembre de 2012

LAS ACEPCIONES DEL VERBO PICAR

Curioso esto de las palabras y sus diferentes acepciones. Tomemos un ejemplo: "picar". Un verbo, como otro cualquiera, de la primera conjugación. Pues bien, puede ser que te pique el gusanillo. Que está muy bien, porque puedes comer cualquier cosa que te apetezca en el momento, sin remordimientos calóricos. O lo que es lo mismo, te vas a picar algo. Claro que luego, se te puede picar una muela
Hay gente a la que le puede picar la curiosidad. Y es cuando, te despiertas a media noche, con una zozobra interior que no te aguantas, porque ya no sabes si Belén Esteban se ha recociliado con su marido o toca estar tirándose los trastos. Claro que, a veces, te enteras de esas cosas en que te pican y no sale sangre... (vaaaale, es realidad es "pinchar". Tomémoslo como una licencia poética)
Luego está eso que dice Arguiñano de picar la cebolla muy menudita muy menudita... que, entre tú y yo, es un tongo. Esa velocidad picando cebolla es imposible. Además, al final hay que pasarlo por la batidora porque si no el niño te dice que le pica la cebolla.
También te pueden mandar a que te la pique un bicho. O llamarte picaflor. Entonces tú puedes hacer dos cosas: picarte o no picarte
De niños salía por la tele Pedro Picapiedra, que se supone que picaba piedras. O Mariano Medina que te contaba que el mar está picado, o que está lloviendo. Y si llueve se pica la pintura del coche o te acatarras y te pica la garganta.
Una expresión muy graciosa es esa de eres más malo que el bicho que picó al tren. Y aquí ya vamos entrando en materia. Porque ¿qué bicho fué el que picó al tren? ¡¡No puede ser otro que una abeja!!





En este caso, ¡un enjambre enterito de abejas!









 Esta vez las abejas fueron directas a casa de unos amigos. Les gustó mucho. Claro que, a alguno le picó la conciencia y la tuvo que empezar a comer por el culo porque le daba pena mirarle a los ojillos antes de hincarle el diente...






Y como se supone que las abejas nacen en un país multicolor, pues hay que aderezar el ambiente con unas gráciles florecillas ¿os parece?






Y una vez puesta esta pica en Flandes, me despido hasta el próximo post. 


Un abrazo... Dulcemente.

lunes, 12 de noviembre de 2012

UNAS GALLETAS MOLONAS (O SUPER-GALLETAS SUPER-MOLONAS)

¡Menudo frío hace hoy! Debería estar con mi mantita en el sofá en vez de tecleando como una posesa en el ordenador, con las manos heladas y este frío en el cuerpo que no se pasa con nada... (yo lo llamo "frío intrínseco", que se me pega como una lapa).


Esto me recuerda a una de mis hermanas, también muy friolera (y muy amante de meter un "super" delante de cada palabra que emite), a la que voy a dedicar este post. Resulta que cuando metí la primera entrada en el blog, en la que dedico este trabajo a mi madre, ella lo leyó en voz alta para toda la familia y no paró de meter "incisos de su cosecha" y la muy caradura se autodedicó el blog enterito!. Con lo que: hermana, por méritos ampliamente ganados, te brindo este super-post de tu super-hermana super-pequeña.


Ya tenía ganas yo de meter alguna galleta en el blog. La masa está hecha siguiendo la receta de "el rincón de Bea", una super-repostera, no os penséis que me lo he inventado yo. Son galletas de mantequilla y hay que hacer un esfuerzo titánico para no comértelas todas según salen del horno. También es imprescindible tener un buen escondite para ellas mientras preparas la decoración...


La decoración es a base de royal icing o glasa real. Yo también sigo, aunque no al pie de la letra, las indicaciones que hace Bea en "el rincón de Bea". Esto de decorar con glasa es todo un mundo de anarquía. Cada uno lo hace cómo más le gusta.


Aquí las tenéis un poquito más de cerca.


Y también sobre fondo rojo.
A falta de testigos más imparciales, espero que os valga con el veredicto de mi santo y, como ya dije, catador oficial: "¿puedo comer una más?"






Un super- abrazo... super - Dulcemente.






jueves, 8 de noviembre de 2012

¿QUÉ CARAJO ES UN CAKE POP?

¡Hola a todos otra vez!
Para los que tenéis facebook, ya habéis visto los Cake Pops... Para los que no lo tenéis, os los presento


Para unos y para otros, os cuento que un Cake Pop es, básicamente, una bola de bizcocho bañada en chocolate. Mmmmm!!! Apetecible, no?



Yo no sé cómo deberíamos llamarlo en castellano (¿Tarta Chupa-chups?¿bizcocho "pegao" a un palo?). No lo sé, la verdad. Pero se admiten sugerencias.



El caso es que toda esta repostería que se está poniendo de moda en España, viene de EEUU, con lo que no hay traducción al español (como software o bluetooth o iphone). Me viene a la cabeza una cosa que decía mi padre: "con lo rico que es el idioma castellano, que tengamos que traer palabras de otros..." Ay, padre! y lo que nos quedará ¿verdad? jajaja.



Luego, el Cake Pop se puede decorar de muchas maneras. En las fotos lo podéis ver. Con más chocolate, con sprinkles... (no he podido resistirme a la tentación de poner otro "palabro"). Se traduce como espolvorear, rociar o esparcir. Hasta ahora teníamos los fideos de colores, de chocolate o confeti. Ahora hay mil formas, motivos y colores.

Os dejo, que me están pasando unos archivos por diente azul a mi yo-teléfono. (¡Je!) Pero primero, más fotos.






Un abrazo... Dulcemente

lunes, 5 de noviembre de 2012

UNA TARTA PARA PAULA

Este fin de semana he tenido un pedido muy especial. Cumplia años la madre de un amigo. Y porque es mujer, madre y una luchadora incansable, me ha encantado endulzarle el día de su cumple.


Mi amigo me llamó y me pidió una tarta pequeñita. Me dijo que no le gustaba la nata y que le encantaba el chocolate. Y ahí tenéis el resultado.


Una layer cake rellena de ganache de chocolate negro a la naranja recubierta de ganache de chocolate blanco y adornada con buttercream de crema de avellana y virutas de chocolate negro. (O lo que es lo mismo; bizcocho relleno de chocolate, cubierto de chocolate y adornado con chocolate con avellanas y virutas de chocolate)


¡Felicidades Paula!

(Lamento no poder enseñaros el corte de la tarta, pero está feo entregarla sin un cacho. Mi amigo me prometió tirarle una foto cuando la cortaran.)

Un abrazo... Dulcemente.



¡¡MOMIAS Y BICHOS!!

Ahora que ha terminado este laaargo fin de semana, consigo sacar un rato para escribir este post. ¡Por fin! Y es que he tenido trabajo a porrón. Pero, lo más importante es que mi hijo, mi santo y yo, hemos hecho una excursión para ver a una gran amiga y ¡han venido mis sobrinos! (que viven fuera de España y los veo de pascuas a ramos).
Con tanta celebración, y aprovechando que era Halloween, mi cocina fue invadida por una jauría de ¡¡momias y bichos verdes!!.



La verdad es que yo no soy muy "jalogüinera", pero mi amiga, Rocío, es una amante acérrima de esta fiesta y no podía llevarle unos Cake Pops comunes y corrientes. Permitidme un pequeño inciso: Rocío, junto su hermana Mari y su amiga Mª José, son unas excelentes artesanas. Hacen unos bolsos preciosos, y broches, y collares... Os enlazo su página de facebook, para que echéis un vistazo "Xelda, feitura artesá". Todo hecho a mano, ¡hasta la etiqueta!.
Sigo con el tema que nos ocupa... Mis sobrinos, tres para más señas, y golosos hasta el tuétano, disfrutaron como pepinillos. Los pobres no sabían si quedarse con los bichos o con las momias. Tanto, que ni siquiera echaron de menos las "rocas de chocolate" que suelo hacerles cuando voy a verlos... (prometo post y fotos de las "rocas de chocolate").



Los bichos verdes son rellenos de oreo y cubiertos con chocolate (verde, of course).



Las momias son Cake Pops de sabor vainilla y recubiertos, también, de chocolate.
Está feo que lo diga yo, pero estaban bueníííísimos, o mejor, y dada la fiesta que se celebraba, estaban de mueeerrrrte.

Os dejo con más fotos.
Un abrazo... Dulcemente.